El plan, presentado por Efraín Alegre a pedido de Lugo, fue sancionado por ambas cámaras, pero nunca fue remitido al Ejecutivo para su promulgación.
En momentos en que en el vecino país Brasil apuran las concesiones aeroportuarias para afrontar la demanda de vuelos que implicará el Mundial de Fútbol y las Olimpiadas a realizarse próximamente en dicho país, en el Paraguay se sigue dilatando una decisión similar por cuestiones políticas.Es así que el proyecto de ley, presentado por el entonces ministro de Obras Públicas y actual senador liberal Efraín Alegre, a iniciativa del presidente Fernando Lugo, lleva meses “dando vueltas” en el Congreso y su remisión al Ejecutivo para su promulgación se dilata ante la negativa del titular de Diputados, el colorado Víctor Bogado, de firmar la resolución. El mismo alude que el proceso de estudio del proyecto aún no culminó, a pesar de que el documento ya fue sancionado por ambas Cámaras legislativas.
Con esta dilación incluso se está ante la violación de dos artículos de la Constitución Nacional atendiendo a que ya vencieron los plazos previstos para el tratamiento de urgencia, que pidió el Ejecutivo cuando remitió el plan.
El proyecto contempla la concesión del aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi (ubicado en Luque); la estación aérea Guaraní (que está en Minga Guazú, departamento de Alto Paraná) y el aeródromo de Mariscal Estigarribia (Chaco). La modalidad propuesta consiste en conceder la administración aeroportuaria por un tiempo determinado a una empresa privada, a cambio de que esta se encargue de invertir en la modernización total de las instalaciones.
El estudio del proyecto generó polémica ya que los funcionarios del aeropuerto amenazaron con huelgas y paralización total de las actividades alegando que con el plan se ponía en peligro sus lugares de trabajo.
A nivel político los colorados y otros sectores también cuestionaron el proyecto alegando que respondería a negociados.
Pese a ello, los senadores levantaron la solicitud de urgencia pero trataron y aprobaron el documento. Luego pasó a consideración de Diputados, donde no levantó la urgencia por lo que al no terminarse su tratamiento en el plazo previsto, ya que la sesión quedó sin quórum, tuvo sanción automática. Los diputados argumentando que el Senado levantó la urgencia, y que eso también corría para Diputados, estudiaron nuevamente la normativa, introduciendo modificaciones. Una vez devuelto al Senado, estos resolvieron que el proyecto ya fue sancionado.
Ante esta situación, las comisiones asesoras de la Cámara de Diputados (Constitucionales y Legislación) esperan que la plenaria sea la que decida sobre el tema. Los miembros de Constitucionales expresaron que ya no pueden dictaminar sobre una ley que ya fue sancionada. Misma postura sería asumida por la mayoría de Legislación.
Fuente: www.lanacion.com.py
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